Un estudio realizado por IPA ( Innovations for Poverty Actions) presentó sus resultados preliminares sobre la respuesta del sistema educativo colombiano frente a la llegada de estudiantes migrantes venezolanos. Más de 670 mil niñas, niños y adolescentes han sido acogidos en instituciones públicas, lo que plantea retos y oportunidades para su integración y desempeño académico. A partir de información recogida en 21 colegios públicos de tres ciudades, compartimos aquí los principales hallazgos.
Entre mayo y septiembre de 2024, se recogieron datos de 21 instituciones educativas públicas ubicadas en las ciudades de Barranquilla, Cali y Medellín. La selección de las escuelas se fundamenta que al menos el 10 por ciento de su población estudiantil estuviera compuesta por migrantes venezolanos. La muestra de información recolectada se compone de:
• 2.712 estudiantes (17,2 por ciento de venezolanos).
• 1.917 padres y tutores (17,3 por ciento de venezolanos).
• 243 miembros del personal escolar, incluidos profesores, directores y coordinadores pedagógicos.
Los datos se recogieron mediante encuestas y entrevistas con alumnos de los cursos 1º, 3º, 5º y 8º y con sus cuidadores y educadores. También se analizaron evaluaciones en lectura (EGRA) y matemáticas (EGMA) en 3º y 5º grado.
Amistades y discriminación en el aula
El estudio analizó cómo la composición del aula y las conexiones sociales influyen en las experiencias de los estudiantes en las aulas. Como resultado se encontró que las escuelas son espacios clave para fomentar la confianza, la amistad y la inclusión entre estudiantes migrantes y colombianos.
• Casi todos los estudiantes (98-99%) dicen tener amigos en la escuela, independientemente de su nacionalidad.
• Más del 75% de los estudiantes migrantes creen que sus profesores confían en ellos tanto como en sus compañeros colombianos.
• No existen diferencias significativas en la victimización por acoso escolar entre estudiantes colombianos y venezolanos.
• La discriminación no es innata, sino que es adquirida. Los informes sobre discriminación en el aula aumentan considerablemente en función del curso y no de la nacionalidad. Mientras que ningún profesor de 1º curso declaró haber sido testigo de discriminación, casi el 50% de los profesores de 8º curso sí lo reportó.
• Muchos estudiantes colombianos escuchan comentarios negativos sobre los migrantes en sus casas o círculos sociales (19% en 5º grado y 30% en 8º). Aunque estas percepciones no se traducen necesariamente en opiniones negativas hacia sus compañeros de clase, sí evidencian la necesidad de fortalecer las relaciones y la inclusión en las comunidades más allá del aula.
Aprendizaje académico
Se examinó si la proporción de alumnos venezolanos en una clase, o el número de amigos venezolanos que tenía un alumno, estaba relacionada con diferencias en el rendimiento académico. Este análisis se desglosó por estatus migratorio para identificar patrones específicos de cada grupo.
El rendimiento académico se midió entre los alumnos de 3.º y 5.º grado utilizando dos herramientas estandarizadas:
• Evaluación de lectura en los primeros grados (EGRA): se evaluaron las habilidades de lectura pidiendo a los alumnos que leyeran dos cuentos cortos adecuados para su edad. La medida principal fue el porcentaje de palabras leídas correctamente.
• Evaluación de matemáticas en los primeros grados (EGMA): evaluó las competencias matemáticas básicas, como la suma, la resta, los patrones numéricos y el orden de los números, basándose en el porcentaje de problemas resueltos correctamente. También se analizó si los resultados académicos de los estudiantes estaban relacionados con la situación legal de sus familias en Colombia.
Como resultado, la interacción entre niños, niñas y adolescentes migrantes y colombianos muestran asociaciones mixtas en los resultados académicos. La presencia e interacción con estudiantes venezolanos.
Respuesta de las escuelas y los docentes
Para comprender las respuestas institucionales, se preguntó a los directores de las escuelas si se habían reasignado recursos para hacer frente al aumento de la matriculación de migrantes. Se preguntó a los docentes si habían recibido formación relacionada con la integración de los migrantes o si habían realizado ajustes en los planes de estudio. Los docentes también compartieron sus percepciones sobre las similitudes académicas entre los alumnos, la presencia de discriminación y sus prácticas en el aula en materia de inclusión.
Como resultado las instituciones educativas para adaptarse a los flujos migratorios, priorizan el fortalecimiento de capacidades de sus docentes sobre la reasignación de recursos.
• Más de dos tercios de las escuelas implementaron capacitaciones o actividades especiales relacionadas con la integración de estudiantes venezolanos.
• Entre el 30 % y el 50 % de los docentes, en todos los grados, reportaron haber hecho adaptaciones curriculares para apoyar la integración de los estudiantes migrantes, con tasas ligeramente mayores en los primeros grados.
• Menos del 15 % de los rectores reportaron haber reasignado recursos debido a la llegada de estudiantes migrantes.
• Más del 60 % de los docentes de 3° y 5° grado reportaron haber enseñado sobre la crisis en Venezuela, lo cual sugiere un alto nivel de compromiso con contenidos académicos relacionados con la migración.
Conclusión
Los hallazgos muestran que los colegios públicos en Colombia son espacios clave de integración entre estudiantes migrantes y nacionales; la mayoría de los estudiantes reporta relaciones positivas y los docentes han asumido un rol activo en la inclusión. Las diferencias académicas, especialmente en matemáticas, y la presencia de percepciones negativas hacia la migración en los hogares, subrayan la necesidad de políticas que fortalezcan el acompañamiento en los entornos educativos de manera focalizada y más allá del aula.
Uno de los retos más notorios es el acoso escolar. Si bien no se asocia directamente con la nacionalidad, su carácter generalizado resulta preocupante. Este hallazgo refuerza la necesidad de fortalecer las estrategias de prevención y atención al acoso, con un enfoque que promueva la convivencia escolar y la protección integral de todos los estudiantes migrantes y nacionales.
Ver estudio completo aquí