25 Noviembre 2025
Esta movida estratégica le permitirá al grupo duplicar su presencia en el sector de residuos peligrosos de Estados Unidos, posicionándose como el segundo actor principal en este mercado en rápido crecimiento.
La adquisición no solo amplía su plataforma operativa a nivel nacional, sino que también refuerza su presencia en industrias clave como la sanidad, la fabricación de semiconductores y la energía limpia. La transacción, valorada en 9.8 veces el EBITDA estimado para 2026, promete una importante creación de valor para los accionistas. Se prevén sinergias de 120 millones de dólares para el cuarto año, con una contribución positiva a los beneficios por acción desde el segundo año.
Tras la compra, los ingresos de Veolia en residuos peligrosos ascenderán a 5.200 millones de euros, con un margen EBITDA del 17%, lo que impulsa la ambición de la compañía de lograr un crecimiento del EBITDA de al menos el 10% entre 2024 y 2027.
La integración de Clean Earth, con sus 82 ubicaciones y permisos en todo el país, es altamente complementaria al negocio existente de Veolia. Esta unión acelerará el crecimiento al mejorar la logística y expandir las capacidades técnicas, incluyendo el tratamiento de contaminantes emergentes como los PFAS.
Totalmente alineada con su programa estratégico GreenUp, la operación está financieramente disciplinada y se espera que cierre a mediados de 2026, sujeto a las aprobaciones regulatorias y de los accionistas de Enviri.
































