miércoles, 2 de julio de 2025
Juliana no solo camina las calles de Manizales, las transforma. Artista, activista y emprendedora, combina la lucha por los derechos LGBTIQ+ con la creación de un universo visual propio.
“Me encanta el poder crear y combinar lo que es el activismo con la calle y la selva, recuperando los espacios que nos han negado históricamente”, afirma la chica trans no binarie, como ella misma de define.
Su talento encontró un escenario ideal en Sembradores de Paz, feria liderada por el SENA Caldas. Allí, presentó Calle Selva, un emprendimiento que fusiona diseño, protesta y naturaleza.
“Es una simbiosis donde se complementan mis diseños: stickers, imanes y otros productos que vienen de mis ideas”, explica con orgullo.
Además de emprender, Juliana estudia estructuras livianas en el Centro de Procesos Industriales y Construcción del SENA Caldas. En medio de risas, responde sin dudar cuando se le pregunta si es feliz allí: “Claro que sí, lo soy”. Porque para ella, el conocimiento también es una forma de resistencia.
Historias como la suya florecen en los pasillos del SENA, donde el aprendizaje se convierte en motor de inclusión. Allí, no solo se forman técnicos y emprendedores; también, se fortalecen identidades, se visibilizan luchas y se siembran nuevas formas de habitar lo social.
